El vino es de los mejores regalos que existen. Idóneo para todo tipo de personas, aunque no les guste, siempre encontrarán un momento en sus vidas para compartirlo con alguien a quien si guste del vino. Pero seleccionar que vino comprar para regalar, cual es el ideal ya no es tan fácil. Eso, amigo o amiga, ya es harina de otro costal. Hay que conocer los gustos de la persona que será agasajada.
MI OPINIÓN SOBRE QUE VINO COMPRAR PARA REGALAR
Para ello hemos de pensar que hay diferentes tipos de consumidores de vino:
- El bebedor casual. No está habituado al vino y no conoce su mundillo en profundidad. Lo mejor es obsequiarle con la botella de vino al que está acostumbrado a consumir de forma normal. Lo mejor es decantarse por algún vino blanco sutilmente dulce o bien afrutado.
- Bebedor frecuente pero no entendido en vinos. Este también bebe otras bebidas alcohólicas, como cerveza o bien destilados. Seguro que le gustará, porque no llega a ser un sibarita del vino, un tinto crianza o bien un blanco joven seco.
- Amantes del buen vino. Estos son los más difíciles de agradar y corres el riesgo de que te pillen intentando ser un entendido cuando, a lo mejor, no lo eres. Mi consejo es que siempre vayas de humilde, nunca de entendido, así, a poco que te esfuerces siempre quedarás por encima de tu más o menos falsa modestia. Hay que tener en cuenta que el mundo del vino es tan amplio que incluso los más entendidos saben que es mucho más lo que desconocen. Su conocimiento sobre determinados géneros de vinos hace que el regalo sea más personal. Se debe conocer de antemano los vinos que le agradan y sobre todo cuáles son sus vinos predilectos. Seguramente los grandes reservas u otros vinos con menos crianza pero mas distinguidos.
- Y los Grandes Sibaritas. Aún más complicados que los anteriores. Cuidadín con estos que la picias por menos que canta un gallo. Es poco probable que prefieran vinos poco elegidos y de baja reputación. Para ellos es conveniente obsequiar un vino de calidad, buscando en la gama más alta de la bodega. ¡Que se le va a hacer, te va a doler en el bolsillo! pero ¿que no se hace por un buen amigo o amiga excepto sustituir a Cofidis?
Cuando lo tengas decidido, un consejo, si lo quieres, busca online regalar vino y disfruta con la variedad e imaginándote la cara que va a poner tu amiga o amigo cuando te vea con la botellita de regalo –oyyyyyoyoyoy, pero si no hacía faaaalta, que detalleeeee, muaaa, muaaaa, muuuuua…
MI OPINIÓN SOBRE QUE VINO COMPRAR PARA REGALAR – MIS TRES RECOMENDACIONES: Sambuca di Sicilia, Mandolás de Oremus, y Belondradre y Lurton dos mil catorce blanco.
Una compañía vinícola del norte de Italia se puso en contacto con Mezzacorona y mandó una misión de exploración en pos de un paisaje y una historia. Deseaban ampliar su cartera. La fresca montaña Pinot Grigio se había transformado en su identidad. Lo que hallaron en Sicilia no fue solo un lugar preñado de ocasiones, también uvas locales que merecían especial atención de alguien. Y edificaron una bodega cerca del mar, en Sambuca di Sicilia.
Transformaron viejos viñedos y plantaron nuevos con Grillo y Nero d’Avola. En dos mil y uno, hicieron del gran Lucio Matricardi el enólogo del nuevo proyecto llamado Stemmari. Había un código, una forma profunda empapada de hacer negocios que los extranjeros del norte debían aprender. Matricardi, Stemmari halló una forma de cohabitar. Le dieron a Stemmari un nombre siciliano: Feudo Arancio. Ya han pasado dieciséis años. Pues bien, este es uno de esos vinos, siciliano en este caso, con el que quedarás como un grande regalándolo. No te digo lo que vale ni lo que cuesta, mejor investígalo tu, que luego “to se sabe“.
Ahora y saltando de párrafo te hablo de otro. De la bodega Oremus, mítica. Haciendo historia, Oremus es el nombre de aquel viñedo del que se extrajo una uva especial allá por mil seiscientos treinta. De ahí a una bebida dulce que se bautizó como ‘vino de lágrima de Tokaji’. Un néctar que conquistó a una princesa de Transilvania, y su príncipe le obsequió el viñedo y la bodega del mismo nombre. La esencia jamás llegó a perderse.
Hoy, en Oremus se habla español. En mil novecientos noventa y tres, tras la caída del muro de Berlín y el desmantelamiento de la Unión Soviética, Vega Sicilia decidió apostar aquí y adquirió la bodega, fundando Tokaj Oremus. Fue una revolución para la zona. Instalaciones ejemplares, nuevos viñedos, un enorme asesoramiento técnico… Y la visión comercial de Vega Sicilia. Pues bien, otro vino, cualquiera de los de esta bodega, por ejemplo Mandolás, para regalar. Y no se te olvide contar la historia para quedar como Dios. Mandolás es un blanco seco al estilo de la Borgoña. El vino dulce representa un mercado pequeño. Mejor que mejor para regalar a un sibarita del vino.
Belondradre y Lurton dos mil catorce blanco es otro de mis consejos y el último de este post. Ten en cuenta que cada parcela es fermentada y criada separadamente en este vino, que es el ‘top’ de la gama de Belondrade. También, la fermentación se desarrolla de forma espontánea controlada. Aunque no entiendas lo precedente sí intuirás que se trata de una preparación muy cuidada y al milímetro que termina ofreciéndonos un Verdejo que enamorará a cualquier amante de los vinos de Rueda. Se trata pues de un vino que evoluciona realmente bien en botella por su acidez.
