Sabemos que, a la temperatura adecuada, se pueden apreciar y disfrutar los matices del vino. Y lo que importa es la temperatura de servicio del vino, pues podemos destruir un gran caldo o esconder algunos de sus defectos. Cada vino tiene una temperatura de servicio diferente.
noviembre 2020
Todo depende de sus cualidades. Ten en cuenta que los extremos negativos eliminan una gran parte de la personalidad de un vino; a temperaturas más altas, el vino pierde su atractivo, acentúa el vino, oscurece los sabores y aromas.
Las bajas temperaturas no favorecen la percepción olfativa, ocultando muchas de sus características.
Destacan los vinos rosados y blancos, especialmente los jóvenes y cavas, con aromas frutales y florales. Las bajas temperaturas, entre 3 y 4 C. esconden estas características y aunque estos vinos deben beberse fríos, hay que buscar un punto intermedio donde podamos apreciar todos los matices.
Nos cuentan más en:
[…] Source link […]